Es fantástico que haya artistas que aprovechen su fama y su popularidad para tomar conciencia y llevar a cabo acciones destinadas a luchar contra causas necesarias y vitales.
Son varios los rostros populares que desde sus cuentas de Instagram o de Twitter hacen llamamientos para salvar el planeta, que prestan su imagen de manera desinteresada para dar voz a la madre tierra; el penúltimo caso es el de David Gilmour, componente de la mítica banda Pink Floyd.
Pink Floyd, con su rock progresivo y psicodélico, son uno de los referentes y uno de los iconos de la historia de la musica y de la cultura pop; himnos como «Another Brick In The Wall» o «Wish You Were Here» forman parte del imaginario de cualquier melómano que se precie o presuma de serlo.
Por eso, no es de extrañar que una subasta de guitarras organizada por parte de David Gilmour tuviera el éxito y la repercusión que ha tenido, recaudando más de 19 millones de euros que el artista va a donar para combatir el cambio climático.
La estrella de rock inglesa dice que donará cada céntimo de las ventas de la subasta a ClientEarth, una organización ambiental sin ánimo de lucro.
El propio Gilmour justificó así su acción, «La crisis climática global es el mayor desafío al que la humanidad puede enfrentarse y, estamos a unos pocos años de que los efectos del calentamiento global sean irreversibles».
Ojalá más gente con poder mediático y económico se sume a la empresa de Gilmour y decida recaudar o donar parte de su fortuna para luchar contra algo que a todos nos atañe; ¡Qué enorme es el poder de la música!
Fuente: Cultura Inquitea