Uso de paneles solares en la UDES para la conservación de la energía

Uso de paneles solares en la UDES para la conservación de la energía

Uso de paneles solares en la UDES para la conservación de la energía 1080 496 Apolo Energy

Paneles solares de la UDES generan el 13,8 % de la energía que consume esta universidad en su campus en Bucaramanga.

El otro 86,2 % proviene de hidroeléctricas, otra fuente de energía renovable.

Esta es la institución educativa con el sistema fotovoltaico más grande en el nororiente colombiano, en proporción con su consumo y cumple con los protocolos de Kyoto y París.

La Universidad de Santander empezó a instalar los paneles en 2018 en el bloque Guane y continuó en 2021 en los bloques Arhuaco, Chibcha y Carare y en el parqueadero. La producción energética es monitoreada en tiempo real en una plataforma digital.

El año pasado, este centro de educación superior consumió 1 millón 666 mil kilovatios hora (kWh), de los cuales 231 mil kW/h los generaron sus paneles solares, informó el jefe de Planta Física de la UDES, Sergio Contreras.

La energía solar abastece la red de aires acondicionados y si por condiciones climáticas no alcanza a generarse la requerida en un momento crítico, se inyecta la energía convencional.

El sistema fotovoltaico le permitió ahorrar el año pasado cerca de 190 millones de pesos en facturación de energía.

La UDES también cuenta con sistemas fotovoltaicos instalados en sus sedes en Valledupar y Cúcuta.

Según el Ranking UI Greenmetric 2022, la institución se ubica como la tercera universidad más sostenible de Colombia y la quinta más ‘verde’ en Suramérica.

La gestora ambiental, Patricia Plata Delgado, consideró que producir el 13,8 % de la energía total que se gasta es una gran hazaña porque la mayoría de empresas de la región que han instalado sistemas similares alcanzan a producir entre el 3 % y el 6 % que consumen.

Además, destacó que estos sistemas carecen de pilas almacenadoras que evitan un impacto negativo en el medioambiente. “En ningún momento vamos a tener que generar los residuos peligrosos que emiten las baterías”.

Recordó que inicialmente la unviersidad generaba alrededor de 620 toneladas de dióxido de carbono y diminuyó a 90 toneladas y la meta es seguirlas bajando “con adecuada gestión y mejorando nuestro desempeño ambiental”.

Imagen: tomada de video

Fuente: Página de facebook de Ecolecuá